Texto bíblico base: Marcos 14.47
Pero uno de los que estaban allí, sacando la espada, hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja.
Contexto Bíblico: Marcos 14.43-50
43 En ese momento, mientras Jesús estaba todavía hablando, llegó Judas, uno de los doce discípulos, acompañado de una multitud con espadas y palos, de parte de los principales sacerdotes, de los escribas y de los ancianos. 44 Y el que lo entregaba les había dado una señal, diciendo: «Al que yo bese, Ese es; lo prenden y se lo llevan con seguridad».
45 Cuando llegó Judas, inmediatamente se acercó a Jesús y le dijo: «¡Rabí!». Y lo besó. 46 Entonces ellos echaron mano a Jesús y lo prendieron. 47 Pero uno de los que estaban allí, sacando la espada, hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja.
48 Y dirigiéndose Jesús a ellos, les dijo: «¿Cómo contra un ladrón han salido con espadas y palos para asegurarse que me arrestaran? 49 Cada día estaba con ustedes en el templo enseñando, y no me prendieron; pero esto ha sucedido para que se cumplan las Escrituras». 50 Y abandonando a Jesús, todos huyeron.
Reflexión Bíblica – Meditación Cristiana – Devocional Diario
En Juan 18.10 leemos que fue Pedro quien desenfundó su espada e hirió a Malco, el siervo del sumo sacerdote.
Es interesante el relato de Juan, te animo a leerlo. Jesús sabía lo que iba a suceder. Pero sus discípulos no.
La incertidumbre de aquel momento fue tal que ellos le preguntaron: ¿Sacamos la espada Señor?
Jesús les dijo que no, pero Pedro la sacó igual. Y si hubiese tenido puntería, Jesús hubiese tenido que hacer un milagro mucho mayor con Malco…
(Solo le pegó nuevamente la oreja).
Ahora, Pedro, se jugó la vida por Jesús en aquel momento, sin importarle cuántos habían en frente.
La diferencia con nosotros es que muchas veces parece que NO somos capaces de jugarnos por Cristo, por Su obra, por el Evangelio. ¿Será que esto también te sucede a ti? Espero que no, pero sí que es para muchos…
Muchas veces, simplemente vivimos haciendo lo estrictamente necesario, asistiendo a nuestras iglesias, ofrendando lo que nos parece, oyendo del mensaje, y luego a casa, a seguir con nuestros proyectos y deleites.
Y al parecer, muchos están ya satisfechos con eso, pero eso no es lo que nos pide el Señor. Debemos involucrarnos, servir, actuar y SER verdaderos cristianos.
¿Será hora de ser un poquito más como Pedro? ¿De actuar con el corazón? ¿De defender al Maestro? ¿De actuar en vez de hablar?
¡Saquemos la espada de la Palabra y anunciemos la salvación a través de Jesús! Llevemos la palabra de Dios adónde sea que vayamos.
¡Eso es lo que Dios espera de cada uno de nosotros!
Entonces, ¿Lo harás?
¡Yo espero que sí, pero aquel a quien llamas Señor lo espera aún más!
¿Tomarías unos instantes para hablar sobre este tema con tu Señor? Si puedes hazlo.
Oración
Padre Celestial, te agradezco por la vida que me das, por la salvación, por tu amor por mí y por la oportunidad que me das de servirte.
Te pido que me des valor y coraje para hacer lo que tú me has mostrado, quisiera ser un poco más como pedro Señor. Ayúdame a cumplir tu voluntad, a hacer lo que debo, Te
Señor te amo y quiero hacer lo correcto. Te entrego mi vida y me pongo en tus manos. Por favor, oye mi oración. Padre, para ti la gloria, en el nombre de Jesús, amén.
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Notas
- Las citas bíblicas fueron tomadas con permiso de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA) © 2005 byThe Lockman Foundation.
- La imagen de portada es un trabajo de Gracia y Vida utilizando la imagen original de Foto de Pixabay.