Santiago 1-1 – Introducción Al Libro

Santiago 1-1 – Introducción al libro – Estudio bíblico devocional

Introducción

En esta primer parte del comentario veremos solamente el primer versículo y te contaremos un poco más sobre el libro en su conjunto, esto te ayudará a poder ver y entender más profundamente la situación de aquellos que recibieron esta hermosa y muy práctica carta.

Ya hemos publicado una muy breve introducción a la epístola (carta) de Santiago, en la que hemos brindado otros detalles importantes sobre la epístola, por ejemplo, quien había sido su autor, el pastor principal de la iglesia de Cristo en Jerusalén, antes de la dispersión de la iglesia.

En aquella introducción también hablamos sobre el significado de “la dispersión”, también vimos quienes eran los receptores de la misma y además el contexto histórico en el que se hubo escrito. Te invitamos a leerla en cuanto tengas oportunidad.

Hoy aquí veremos los siguientes temas:

La humildad de Santiago
Los conceptos manejados por el autor en la epístola
Contenido de la misma y fecha de redacción
Destinatarios
El objetivo del autor
Unas palabras nuestras para ti

Pero antes de comenzar nuestro estudio, quisiéramos presentarte muy brevemente

Unas palabras sobre el comentario de Gracia y Vida

La presente es una porción del Comentario Bíblico sobre la epístola de Santiago, publicado por Gracia y Vida. El mismo pretende ayudar a los lectores en la interpretación y en la aplicación de las escrituras a sus vidas; teniendo además como objetivo que la lectura sea fluida y de fácil interpretación.

Con dicho objetivo en mente, y a fin de entender los distintos versículos de la manera más apropiada, nos ayudaremos con un análisis del contexto histórico y también con las herramientas hermenéuticas necesarias para llegar a una correcta interpretación; pero todo esto sin entrar en largas discusiones, ni en detalles demasiado técnicos.

Sin más, y primero que cualquier otra cosa, le invitamos a leer atentamente el texto y orar para que el Señor lo llene de su sabiduría, sin lugar a dudas será Él la gran fuente de toda comprensión y entendimiento. Hecho ésto, ahora sí comencemos con el estudio de los textos que nos convocan, leamos:

El texto

Santiago,siervo de Dios y del Señor Jesucristo:
A las doce tribus que están en la dispersión: Saludos.
Santiago 1.1– LBLA

Santiago 1-1 – Introducción al libro — Santiago, un esclavo de Dios y de Jesús

La humildad de Santiago

Lo más hermoso que encontrarnos en este primer versículo es la modestia de Santiago, quién, como medio hermano del Señor, no se valió de su condición, para enaltecerse delante de quienes recibirían su carta.

Al pastor de laiglesia judeo-cristiana en la dispersión, sólo le bastó decir que era un “doulos”, es decir un siervo de Dios y de Jesús para poder presentarse.

Es desde esa condición de humildad que Santiago comienza su carta. Una humildad digna de ser imitada por todos nosotros.

Veamos ahora un

Brevísimo análisis de la epístola

Conceptos claros

Desde el principio Santiago se preocupa en presentarnos qué es lo importante en nuestra vida cristiana.

El nos irá mostrando con ejemplos muy didácticos cada enseñanza que él espera que incorporemos.

Y en este caso, lo primero que nos muestra Santiago es nuestra posición en cuanto al servicio frente a Dios. Somos sus siervos.

La claridad de conceptos que este autor nos presenta, junto con la practicidad de la carta, es algo que podemos disfrutar en todo el escrito.

Esto mismo nos ayudará a ver la vida en Cristo desde la perspectiva correcta.

Y a su vez obtendremos consejos muy efectivos que nos facilitarán seguir adelante hasta llegar hasta la meta del supremo llamamiento.

Contenido de la epístola

En esta epístola Santiago no escapa, ni esquiva, muchos temas complicados que hacen a la vida cristiana.

Por un lado trata temas como el sufrimiento, la oración, el amor a las riquezas, y la enfermedad entre otros muchos.

Y por otro, ordena a la iglesia primitiva para que sepa qué hacer y cómo asumir distintas cuestiones de manera práctica y según la voluntad divina.

En este sentido será bueno conocer que esta epístola es el libro más antiguo de todo el Nuevo Testamento.

Su fecha de escritura data aproximadamente del año 45 d.C., unos pocos años después de que Él ascendiera.

Los destinatarios

Las doce tribus de la dispersión se refieren a ese pueblo de Dios que había sido obligado a marcharse de sus hogares y de su tierra.

Pueblo que debió perder sus empleos y abandonar familias. Eran cristianos que atravesaban situaciones verdaderamente difíciles.

En este contexto, los receptores de su carta estaban tristes y dolidos, muchos enfermos, otros tantos enfrentando la escasez y la pobreza, tal vez por primera vez en sus vidas.

En este punto vemos que no todo tiempo antiguo fue mejor, la humanidad ha sufrido mucho a lo largo de toda su existencia, y los cristianos no somos la excepción.

Siendo éste elcaso, Santiago nos muestra las herramientas apropiadas para poder salir con altura de cada situación difícil de la vida. Ya veremos esto en el análisis de la epístola.

El objetivo de Santiago

Sus destinatarios habían sido obligados a huir por su fe en Cristo, es así que su fe les había traído grandes pruebas por enfrentar. Santiago sabía que la misma debía ser sustentada y solidificada.

Por ende, Santiago, conociendo muy bien esta situación, no pierde tiempo, ni da vueltas, va directo a cada punto y llama a cada cosa por su nombre.

Esto de seguro nos servirá de ejemplo para saber cómo debemos actuar también nosotros en nuestros ministerios, siendo prácticos y yendo al punto.

Una palabras de Gracia y Vida para ti

Te invitamos a leer esta carta de Santiago muy detenidamente, a tomar cada enseñanza y a obedecer cada consejo.

Santiago te ayudará a vivir con mas paz y con mayorsabiduría tu vida cristiana, a incrementar tu fe y tu entrega a Dios.

Él esperaba que sus receptores maduren y crezcan en la fe.

Sinceramente esperamos que estos comentarios puedan de alguna manera servirte en este mismo sentido.

Que nuestro gran Dios y Señor Jesucristo sea exaltado y glorificado por nuestras vidas, amén.