Versículo Base: Marcos 1.3
Voz del que clama en el desierto:
“Preparen el camino del Señor,
Hagan derechas Sus sendas”
Contexto bíblico: Marcos 1.1-8
1Principio del evangelio de Jesucristo el Mesías, Hijo de Dios.
2 Como está escrito en el profeta Isaías:
«He aquí, Yo envío Mi mensajero delante de Ti,
El cual preparará Tu camino.
3Voz del que clama en el desierto:
“Preparen el camino del Señor,
Hagan derechas Sus sendas”».
4Juan el Bautista apareció en el desierto predicando el bautismo de arrepentimiento para el perdón de pecados.
5Acudía a él toda la región de Judea, y toda la gente de Jerusalén, y confesando sus pecados, eran bautizados por él en el río Jordán.6Juan estaba vestido de pelo de camello, tenía un cinto de cuero a la cintura, y comía langostas y miel silvestre.
7Y predicaba, diciendo: «Tras mí viene Uno que es más poderoso que yo, a quien no soy digno de inclinarme y desatar la correa de Sus sandalias.8Yo los bauticé a ustedes con agua, pero Él los bautizará con el Espíritu Santo».
Textos paralelos:
Mateo 3.1-12 – Lucas 3.1-9 y 17-17 – Juan 1.19-28
Reflexión – Meditación – Devocional – ¿Qué parte nos toca?
Así como Juan el Bautista tenía su propia misión o propósito, también nosotros tenemos asignada una tarea muy importante.
¡Debemos preparar el camino para que todos aquellos que no Le conocen, puedan llegar a Él!
Mas allá de la predicación de la palabra de Dios, lo hacemos a través del testimonio y con ayuda de la oración (orando por aquellos a quienes les vamos a predicar).
Ahora, aunque el mensaje que damos es importante, todavía lo es más el testimonio que tenemos frente a quienes nos observan.
Por ende: ¿Qué ven quienes te rodean? ¿Ven a Cristo a través tuyo?
Habla con tu Padre, pídele ayuda en oración, búscale más cada día, permanece fiel, considera cada día como si fuera el anterior a Su regreso, cumple con tu llamado.
Haciendo eso, viviendo de esa manera, seguramente podremos cumplir con nuestro llamado y estaremos haciendo la parte que nos toca. ¿Lo has considerado?
¡Dios te bendiga mucho!
Algunos consejos prácticos para tu vida devocional
Si te es posible, recuerda que siempre es bueno tener un orden para cada día.
- Levantarnos
- Orar
- Tener nuestrodevocional
- Y proseguir con nuestra rutina
Es el orden más adecuado, pero si no te fuera posible, intenta tener un horario determinado paraacercarte a Dios, en el cual ningún otro evento de tu agenda se le superponga y compita por tu atención.
Si has de tener este tiempo por las noches, asegúrate de ir a la cama con algúnrestode energía, para que, al orar no te duermas, y al leer no se te cierren tus ojos.
Es más que lógico que, para que tu lectura pueda ser de provecho, debes poder comprender lo que lees. No podrás lograr eso en un estado somnoliento…
Por otro lado, aunque Dios entienda que estás cansada/o, espera puedas expresarte sin quedarte dormida/o.
Dios conoce lo que necesitas, pero espera que se lo expreses y que te relaciones con Él dándole un tiempo de calidad.
¿Qué porcentaje de tu tiempo le ofreces? ¿Estás segura/o de que es todo lo que puedes darle? Seguramente Él espera un poquito más, una relación permanente y cotidiana. ¿Lo sabías?
No le des el último lugar a Dios. Tú eres de primer importancia para Él, intenta que sea recíproco desde tu lado. ¿Estás de acuerdo?
Dios te bendiga mucho, te llene de sabiduría, dirija tu vida y te conduzca por su camino cada día. Amén.
Links
Te invitamos a continuar leyendo más reflexiones cortas a través de los siguientes links:
Devocional diario: El ministerio de Jesús
Devocionales basados en el evangelio de Marcos
Nota
Las citas bíblicas fueron tomadas con permiso de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA) © 2005 byThe Lockman Foundation.