Nuestras Luchas Espirituales – Devocional Diario – Marcos 5.2; 5.3; 5.4; 5.5; 5.6; 5.7; 5.8
Hola, muy bienvenida/o a tu devocional diario.
Hoy te invitamos a pensar en nuestras luchas espirituales y a contrastarlas con lo que pasó en la historia bíblica del endemoniado gadareno.
¡Cuánta autoridad y poder por parte de Jesús! Los demonios lo sabían y se postraron delante de Él sin que Jesús debiera hacer nada al respecto.
Sin embargo eso no es lo que sucede con nosotros, quienes tenemos una lucha espiritual cada día. Pensemos juntos en este tema a través de este devocional.
Ahora, antes de comenzar con nuestra reflexión, nos gustaría pedirte que tomes unos segunditos para orar. ¿Podrías? Ahora sí leamos el
Texto base de nuestro devocional de hoy
2 Cuando Jesús salió de la barca, enseguida se acercó a Él, de entre los sepulcros, un hombre con un espíritu inmundo, 3 que tenía su morada entre los sepulcros; y nadie podía ya atarlo ni aun con cadenas; 4 porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, pero él había roto las cadenas y destrozado los grillos, y nadie era tan fuerte como para dominarlo. 5 Siempre, noche y día, andaba entre los sepulcros y en los montes dando gritos e hiriéndose con piedras.
6 Cuando vio a Jesús de lejos, corrió y se postró delante de Él; 7 y gritando a gran voz, dijo: «¿Qué tengo yo que ver contigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te imploro por Dios que no me atormentes». 8 Porque Jesús le decía: «Sal del hombre, espíritu inmundo».
Marcos 5.2-8 – NBLA
Pensemos Juntos
El contexto de la historia y brevísimo análisis
Luego de haber enseñado muchas cosas a sus discípulos y a la multitud (Marcos 4.1-34), y de haber tenido un viaje ni muy placentero ni demasiado tranquilo, sino todo lo contrario (Marcos 4.35-41); Jesús desciende a la tierra de los gadarenos, y un hombre endemoniado, quien no había podido ser dominado por nadie, se presentó frente a Él con una petición.
¿Cuál era:? Lo único que quería era que se lo deje en paz, aunque en realidad, quienes hablaban eran los demonios que tenía dentro. Eran ellos quienes temían ser expulsados y atormentados. En el relato de Mateo sobre este mismo acontecimiento podemos ver que ellos gritaron:
«¿Qué hay entre Tú y nosotros, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí para atormentarnos antes del tiempo?» Mateo 8.29 – NBLA – Puedes leer el relato completo de Mateo en Mt. 8.28-34
Es interesante el mensaje de estos demonios, quienes tenían muy en claro dos cosas: que su destino sería el tormento, y también, que todavía no había llegado el tiempo (no hablaremos aquí del hecho de que tanto Marcos como Lucas obviaron a uno de los dos endemoniados).
También es interesante notar que Lucas nos dice explícitamente que el endemoniado no solo se postró a los pies de Jesús, sino que cayó delante de Él (ver Lucas 8.26-39 en la traducción NBLA o DHH).
Ellos solos reconocieron frente a quién estaban y fueron corriendo hasta Él, cayendo automáticamente a sus pies. Ese es el poder y esa es la autoridad de Jesús frente a los poderes de las tinieblas. ¿Estabas al tanto de esto?
Pensemos en nosotros mismos
Hoy nos gustaría pensar contigo tanto en el hecho sucedido en nuestra historia como también en lo que pasa en nuestras vidas cada día:
La Biblia nos dice muy claramente que nuestro enemigo el diablo anda como león rugiente buscando a quien devorar (1 Pedro 5.8). Él constantemente está acechando a sus víctimas (tú y yo) para presentarnos alguna fruta delicada y apetecible para poder codiciar.
Normalmente no tenemos en cuenta su presencia, ni nos dedicamos a discernir las situaciones que se nos presentan, pero si lo hiciéramos, nos daríamos cuenta de que en muchas hay intencionalidades adversas a la voluntad de Dios para cada uno de nosotros.
Es claro que no son todas y que no podemos andar buscando demonios en todos lados. Eso no es fructífero ni apropiado. Y por otro lado, también debemos saber que no toda tentación sale del mismo diablo sino también de nuestra propia naturaleza pecaminosa (Gálatas 5.17; Santiago 1.13-15).
Pero lo cierto es que necesitamos tener conciencia de la presencia del enemigo y hacer lo necesario como para que la misma no nos afecte, o por lo menos que lo haga con el mínimo daño posible. ¿Es posible hacer eso? Obviamente sí.
La gran diferencia entre Jesús y nosotros, es que Él era (y sigue siendo) Dios, mientras que nosotros somos tan solo sus hijos y que por lo tanto, todo el poder y autoridad que tenemos es delegada y no nuestra.
Por ende, ni diablo ni sus demonios vendrán a postrarse frente nuestro así automáticamente como hemos visto, sino que darán pelea, y por eso es que la Biblia nos da advierte de una guerra espiritual que debemos librar cada día.
Nuestra propia lucha espiritual
¿Has notado que Pablo nos dice en muchas oportunidades que nuestra lucha no es contra carne ni contra sangre? Lee por favor 2 Corintios 10.3-4; Romanos 13.12-14 y Hebreos 12.4. Ve ahora su recomendación a Timoteo en 1 Timoteo 6.12 y además, por favor, lee Efesios 6.10-20.
En este último texto él nos presenta una armadura espiritual, la cual deberíamos utilizar en todo momento, y aunque no hagamos aquí un estudio sobre la misma, lo que sí diremos es que ella está dispuesta y lista para que todos nosotros la podamos utilizar. ¿Estabas consciente de esto? ¿La estás utilizando? ¿Sabes cómo hacerlo?
Te instamos a aprender más sobre este tema y a utilizar lo que Dios te ha dado. Es vital para cada uno de nosotros utilizar cada herramienta regalada por Dios en la manera apropiada, y para ello debemos conocerlas y tener la determinación de ganar destreza con cada una. ¿No es cierto? ¿Qué harás al respecto?
Esto solo te compete a ti, es de tu seguridad de lo que estamos hablando aquí, sólo tú puedes decidir qué habrás de hacer, pero… ¿No te parece significativo que hayan tantas referencias a esta batalla espiritual? ¿Por qué se hablaría de ellas si no tuviéramos por qué prestarle atención?
Tal vez sea el momento para tener en cuenta todo esto y para tomar los recursos disponibles para hacerle frente. Solo de esta manera podremos comenzar a andar de victoria en victoria como también lo dicen 2 Corintios 1.14 y 1 Juan 5.4. ¿Quieres vivir de esta manera? Ya sabes qué debes utilizar.
Volviendo a nuestro texto base
El diablo y sus demonios están absolutamente vencidos por Jesús, el poder y la autoridad de Cristo en esta historia nos lo dejan más que claro. También es evidente que no han sido ni encerrados ni desactivados aún, lo cual nos lleva a vivir en una vida de lucha y de guerra espiritual.
Hay diferentes posturas y mucha literatura al respecto. Así que por nuestra cuenta no tenemos voluntad de discutir con nadie y no lo haremos; pero es importante decir que el equilibrio viene con el conocimiento y con la experiencia. Debemos conocer cómo opera el enemigo, sí, pero también debemos saber qué tenemos a nuestra disposición y a quién tenemos de nuestro lado.
Cristo Jesús ha vencido y por lo tanto tiene poder y potestad por sobre nuestro enemigo. Él está de nuestro lado y dispuesto a ayudarnos. Ese es otro motivo más por el cual deberíamos acercarnos cada día más a Él, fortalecer nuestra fe y buscar nuestro crecimiento y madurez espiritual.
Además, tengamos conciencia de la presencia, de la meta y de los métodos del enemigo, pero no vivamos paranóicos por eso. Nuestro objetivo no debe ser el de batallar sino el de servir con humildad a Dios. Las batallas llegarán solas y nosotros debemos tener el discernimiento y las fuerzas necesarias, además de la armadura puestas.
Sabemos qué hacer, sabemos cómo defendernos, con quién estamos, quién tiene la victoria, qué se espera de nosotros, etc., etc. Por tanto actuemos como es debido y según nuestro llamamiento y según el discernimiento y sabiduría que Dios nos ha dado. ¿Qué opinas tú de esto? ¿Qué harás al respecto?
Dios te guíe, llene de discernimiento y sabiduría, fortalezca, proteja y ayude en todo tiempo.
Te invitamos a orar
Padre celestial te agradecemos por la bendición de ser tus hijos y por todo lo que haces por nosotros. Padre sabemos de las acechanzas del enemigo y por lo tanto te pedimos que nos ayudes a resistir al diablo para que huya de nosotros.
También sabemos que tenemos armas que podemos utilizar y por favor te pedimos que nos ayudes a utilizarlas como corresponde, que nos adiestres para la batalla y que estés a nuestro lado fortaleciéndonos para tener victoria en nuestras luchas espirituales.
Señor, queremos ser vencedores, es por eso que nos ponemos en tus manos y te entregamos nuestras vidas, también queremos alabarte y adorarte Padre. Todo esto que te hemos pedido, lo hacemos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Para tí la gloria, en el nombre de Jesús, amén.
Saludo y despedida de esta reflexión bíblica
Te agradecemos por llegar a este punto en tu lectura. Esperamos que Dios te hable más sobre este tema, y que te ayude en todo esto que estuvimos pensando juntos.
Por otro lado quisiéramos aclarar que no tenemos la intención de discutir con nadie al respecto, solo esperamos que Dios nos guíe y nos hable, llevándonos a Su verdad. Pero aún así, si gustas, puedes escribirnos, leeremos con gusto lo que quieras expresarnos.
Además, por si lo consideras útil, te dejamos más devocionales en estas dos publicaciones:
¡Dios te bendiga mucho!
Notas
La Cita Bíblica fue tomada con permiso de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA) © 2005 by The Lockman Foundation.
A su vez, la imagen de portada corresponde a un trabajo de Gracia y Vida sobre la imagen original de azboomer, la cual fue descargada de Pixabay.
2 respuestas a «Nuestras Luchas Espirituales – Devocional Diario»
Amén amén hermanos Dios te bendiga, Dios te guarde mis saludos desde la distancia feliz tarde, me a gustado mucho poder leer los devocionales para mí comienzo estudio Bíblico
Muchas gracias José, Dios te bendiga mucho!!